La intensidad: sobre la venta de Costa Salguero.
Por Isabel D’Amico
PESADILLA
“Quiero hacer públicas mis intenciones”, dijo el alcalde Pelado de la ciudad de Buenos Aires.
Y prosiguió, más o menos así:
“Si no amurallamos toda la Costanera Norte, los ciudadanos de todas las comunas padecerán las consecuencias de las más terribles sudestadas. Por ello, he decidido eliminar los tres metros de ancho que habían quedado para que el pueblo paseara junto al río. Debo reconocer, con satisfacción, estos treinta años de fructíferos negocios en el predio de Costa Salguero, Punta Carrasco… Pero, sépanlo, habrá otros ciudadanos dispuestos a vivir allí para enfrentar, con enormes ventanales, la desgraciada vista al Río de la Plata. Lo harán cerca de aguas turbulentas, entre temibles amaneceres y soñadas puestas de sol. Ante un acceso tan indigno, he decidido construir allí un barrio náutico y, por qué no, un helipuerto. Semejante patriotismo merece más de una consideración. Por eso, junto a mis 37 adláteres de la Legislatura, decidimos que el caño colector cloacal norte, todo el sistema hidráulico, el sistema eléctrico y el gas- imprescindibles para cualquier ser humano, como uno- sean bancados por todos los ciudadanos. Así, les facilitaremos a estos héroes elegidos una vida DIGNA.”
Me desperté sobresaltada, faltaban unas horas para conectarme con la Legislatura. Era el segundo día de audiencia pública por la venta de la Costanera y me tocaba hablar a mí.
AUDIENCIA PÚBLICA
La participación ciudadana tiene por objeto que el pueblo sea escuchado por los legisladores. Orientados por todas nuestras sugerencias, ellos cumplirían nuestros deseos, ajustándose a las normas vigentes. Y, por sobre todas las cosas, al bien común.
Sabemos que esto no ocurre.
Al no ser vinculantes, las audiencias pasan como las páginas de una revista que ojeamos en la peluquería, mejor dicho, ojeábamos. Así, hay una parte de los habitantes de Buenos Aires que ha aceptado vivir entre demoliciones dolorosas de casas históricas- dignas referentes barriales-, veredas renovadas trimestralmente, o “congeladas”, desde el 1900, sin ninguna voluntad de reparación. Esta parte de la población corre dispuesta a pagar los parquímetros para evitar las multas. Así, avanza entre bicicletas gratuitas, que ya dejaron de serlo. Por supuesto, atraviesan escasos espacios verdes en la mayoría de los barrios, dada la obsesiva voluntad de nuestro alcalde de cementar el propio cielo.
Pero hay otros comportamientos- tan distantes a esa aceptación bucólica, narcotizada por el poder-, capaces de horadar los muros más gruesos del sistema. Aclaración: sin el condimento casero de la paciencia y la tenacidad, dedicarse a otros temas.
Costanera Norte – 1974
TRUCHO
El año próximo vence la concesión de Costa Salguero, un predio de 17 hectáreas de tierras en la Costanera Norte. Cuando el Pelado, perdón, el alcalde de la ciudad, mostró la carta del 4 de copas, sabíamos que el ancho de espada lo tenía marcado. En los pliegos, el 74 % estará destinado a espacio público. Pero, si hasta las plazas están cercadas en Buenos Aires, ¿qué garantía tenemos?
Doy vuelta el asunto: Al concluir la concesión, ese espacio con vista al río- el 100% de la Costanera-, es todo nuestro, ¿de qué 74% nos habla?
.ES DIFÍCIL SEGUIR AL PELADO
En el 2018 y en la Legislatura, se aprobó la creación del “Distrito joven” y se habilitó la concesión de bares y locales gastronómicos. Algo así como lo que fue Costa Salguero durante treinta años, pero con otra onda. Esta área se extiende por más de 6 kilómetros de largo. El distrito se dividió en cinco sectores: el N 4, Punta Carrasco; y el N 5, Costa Salguero.
El proyecto ya tuvo un ganador, quien construirá diez bloques de edificios de hasta 29 metros de altura sobre la avenida Costanera Rafael Obligado, con helipuerto y barrio náutico. Dicen que el metro cuadrado puede superar los U$S 9000.
Ahora bien, lo que se discute es la “rezonificación” de estas hectáreas. De acuerdo a lo que está establecido por la legislación vigente, ese proyecto no se podría llevar a cabo.
Proyecto de edificación en Costa Salguero
Es claro que, si cualquier habitante de esta ciudad desea comprar un terreno para construir su casa, deberá ajustarse a los permisos de edificación del barrio. En el caso del Pelado, no. Sin tener el permiso, ya tiene el proyecto delineado, al ladito del Aeroparque Jorge Newbery. ¿Y los aviones?
SU ATENCIÓN, POR FAVOR
Consultada, la Administración Nacional de Aviación Civil, La ANAC, se pronunció en contra de la iniciativa del Gobierno porteño: “ atenta contra la seguridad aeronáutica y de las personas”, sentenció.
Es decir que, de los 60 legisladores de la Ciudad de Buenos Aires, 37 aprobaron este proyecto en primera lectura, sin siquiera cuestionarse que los avioncitos despegan y aterrizan en el Aeroparque Jorge Newbery, cada tres minutos, a apenas 200 m. del lugar donde piensan edificar.
Y EN ESTE RINCÓN
En la otra mitad de porteños están los que no tienen tiempo pero acompañan, quienes- de “a cachos” se suman, los que traen ideas innovadoras, los profesionales, los que dibujan, aquellos que pintan, programan, usan las redes, escriben, en fin, todos quienes engordan al mundo de delicias sociales. Bien, esta mitad, harta de ser burlada, se organizó mejor.
SE ALINEAN LAS LENGUAS
La audiencia Pública (Proyecto de Ley N 2094-J-20) comenzó el 27/11/20 y seguirá hasta el 27/1/21. Los oradores serán 7053. Es la Audiencia más larga de la historia. Y un detalle: desde un día antes del cierre, sabíamos que cuatro mil quinientos inscriptos eran del palo.
A propósito de qué iremos a pelear, el artículo 8 de la Constitución de la Ciudad señala: “Los espacios que forman parte del contorno ribereño de la Ciudad son públicos y de libre acceso y circulación. La ley juega de nuestro lado”.
¡Vamos esas palmas!
CON UN NUDO INTENSO EN LA PANZA
“Para los jóvenes que desconocen cómo actúan los poderes, soy ´vecina X Roccatagliata´, vivo entre Roosvelt y Rivera. Desde el 2010 pedimos, para el predio donde está el inmueble Roccatagliata -del año 1900-, una plaza y un centro cultural. Quizás si, en el 2012, Lostri, el secretario de Planeamiento urbano del Gobierno de la ciudad, hubiera escuchado las recomendaciones de la Defensoría del Pueblo para reformular el proyecto por estar fuera de norma, el barrio de Coghlan contaría hoy con otro espacio verde. Si Martín Ocampo, actual legislador del Pro, cuando era presidente de la Comisión de Justicia, no nos hubiera aplastado con su veredicto, cuando le pedimos su intervención; si, en la sesión ordinaria en la Legislatura del 19/9/2013, para catalogar a Roccatagliata con “Nivel de Protección Cautelar”, no hubieran adulterado la palabra “inmueble”; si hubieran considerado las presentaciones de dos leyes correctivas para saldar semejante error: si todo lo anterior hubiera sido diferente, seguramente, el Juez Fastman no hubiera podido recurrir a esa “palabrita” que lo habilitó con mayor comodidad a rechazar nuestra primera acción de amparo. Si la lucha de los vecinos no hubiera sido ninguneada en las charlas barriales con Larreta, hubiera podido accionar ante las autoridades de su “propio gobierno “que otorgaron un permiso de obra, de acuerdo a las normas de planeamiento urbano”, NULO. Según sentencia del Juzgado en lo Contencioso y Administrativo N* 8 a cargo del Juez Osvaldo Othaeguy, quien suspendió la obra el 22/12/2016. Finalmente, si el Tribunal Superior de Justicia sin argumentos sólidos, no les hubiera aprobado el permiso, hoy, en plena pandemia, hubiéramos tenido una plaza con añosas palmeras, frondosos árboles y un centro cultural en lugar de torres. El barrio de Coghlan tiene solo 0,35 m2 de espacios verdes cuando, por lo menos, debería tener 10 m2.” El 8 de octubre de 2020, los legisladores de la ciudad de Rodríguez Larreta, de Lilita Carrió, de Martín Lousteau, de Graciela Ocaña y de Roy Cortina, aprobaron, en primera lectura, habilitar lo que hoy nos convoca: la venta de la Costanera y autorizar un emprendimiento inmobiliario en Costa Salguero. ¿Para qué estamos en esta audiencia? Se supone que todos los legisladores de CABA deben escuchar nuestras sugerencias. Por el contrario, arman cofradías en contra de nuestros reclamos, en contra de quienes vivimos en aquellos espacios que demuelen, cementan y oscurecen. ¿Saben?, pareciera que estuvieran en tierras de otros, como los conquistadores hispánicos: a pesar de las artesanías refinadas descubiertas entre las culturas originarias, a pesar de la ingeniería con sus acueductos- superior a lo que ellos conocían-, los conquistadores todo lo destruían. Eran humanos en su máxima miserabilidad. Ustedes tienen la oportunidad de desandar este recorrido, no destruyan su propio hábitat. Quizás, deban escuchar a los más jóvenes, ellos han construido otra relación con la tierra, tienen la conciencia de “ser” en red, porque saben muy bien, todo está en conexión. No sean parte del colonizador contemporáneo, inescrupuloso, destructivo, prepotente. Que no les falte ese sentimiento llamado “patria”. Carlos Skliar dice que el amor a la patria son los gestos. Así, ustedes, podrían comenzar hoy. En Costa Salguero, elijo un parque, “Parque Nuestro Río” para sentir su brisa en mi cara y no, el cemento en mi espalda.Al finalizar, sentí la satisfacción de saber que había otro detrás de mí. Y otro y otro, con la misma pasión, con la misma intensidad y dispuestos a gritar:
LA COSTANERA NO SE VENDE, LA COSTANERA ES DEL PUEBLO.
Excelente nota, Isa: ¡infatigable! luchadora cotidiana por causas nobles, justas, solidarias